EE.UU. vendió en los últimos 15 meses automóviles por 20 millones de dólares a Cuba
LA HABANA, 7 mayo Cuba importó desde EEUU más de 20 millones de dólares en vehículos de diverso tipo entre 2023 y el primer trimestre de 2024, una cifra que indica el incremento de ese negocio, del que se benefician varias empresas del país del norte que recibieron licencias de Washington para ello, informó el Consejo Económico y Comercial Cuba-EEUU.
De acuerdo con un informe de esa entidad, que favorece el incremento del intercambio comercial entre ambos países, pese al embargo de Washington contra La Habana, en esa suma total se incluyen, además de carros nuevos y usados, motocicletas, tractores y repuestos de diversa naturaleza.
La cifra total no pone en evidencia un factor a atender: entre enero y marzo último la suma invertida por compradores de la Isla en carros usados de diverso tipo, incluidos modelos de lujo marca Tesla y Mercedes Benz que circulan por carreteras cubanas, casi se ha triplicado.
Por el concepto de carros usados de entre 1.500 y 3.000 centímetros cúbicos (cc), en 2023 se invirtieron 5.351.491 dólares en la Isla. En los primeros tres meses de 2024, en cambio, la suma asciende a 13.575.731 dólares.
Súmesele a ello el monto de las adquisiciones de camiones de gran tonelaje: en lo que va de año, se invirtieron 123.300 dólares en vehículos de ese tipo con capacidad de 20 toneladas, y 37.500 dólares en los de hasta cinco toneladas.
En cuanto a camiones y vehículos para el transporte de mercancías, las compras fueron del orden de los 89.679 dólares.
Compárese la cantidad acumulada en tres meses con los 89.938 dólares invertidos en camiones de cinco toneladas en 2023, y los 448.491 dólares en camiones de 20 toneladas, todos de diésel, embarcados desde Miami, Tampa y New Orleans.
A la suma total de importaciones de vehículos hay que sumar las partes y piezas de repuesto. En el primer trimestre de 2024, las adquisiciones incluyen estampados de parachoques (2.881 dólares); partes de frenos y servofrenos (3.066 dólares); ejes y partes para tractores (2.620 dólares); neumáticos para carretera y partes para vehículos (30.760 dólares), entre otros.
Las sumas no dejan de llamar la atención, tomando en cuenta que las licencias otorgadas por el Departamento de Comercio de Estados Unidos a contados proveedores de esa nación tienen como condición que el comprador en Cuba sea una persona natural residente en la Isla, o personas jurídicas cubanas y extranjeras, que van desde «empresas privadas propiedad de nacionales de Cuba» hasta embajadas.
Si se toma en cuenta que, como comentara Alejandro Cantón, director de la empresa Maravana Cargo, de Hialeah, que tiene una licencia del Departamento del Tesoro estadounidense para enviar artículos y equipos de todo tipo a Cuba, incluyendo autos, la Aduana General de la República de Cuba cobra entre 20.000 y 56.000 dólares por cada carro importado, se trata de un negocio redondo para La Habana.
Esas importaciones se realizan, además, a través de firmas del régimen cubano autorizadas para operar como intermediarias en las adquisiciones. Esa lista la integran IMPEXPORT, S.U.R.L; SERLOVEM S.U.R.L; TRANSIMPORT; MAQUIMPORT; DIVEP; TRADEX, y MCV Comercial.
Mientras esto ocurre, el Gobierno cubano insiste en que el embargo de Washington contra La Habana es un acto de genocidio y culpa a las sanciones contra el régimen de las privaciones que viven los habitantes de la Isla.
