Miguel Díaz-Canel La batalla fundamental de Cuba es la económica «No dar espacio a la burocracia»

Cuba es la económica

LA HABANA, 16 dic. La batalla fundamental de Cuba es la económica, expresó este domingo Miguel Díaz-Canel, presidente de los Consejos de Estado y de Ministros, al intervenir en la Comisión de Asuntos Económicos de la Asamblea Nacional del Poder Popular (ANPP), reunida en el Palacio de Convenciones de La Habana.

Es por eso –dijo- que la mayor parte del tiempo debe emplearse “en cómo destrabamos cosas, en cómo le quitamos hojarasca al camino que conduce a la solución de los problemas económicos y financieros”.

En presencia de Estaban Lazo, titular del Parlamento y de ministros de varias carteras, Díaz-Canel valoró que si bien el comportamiento de la economía cubana en 2018 se estima discreto y todavía no impacta en la vida de la gente, resulta un resultado meritorio en el contexto en el que se desarrolló el país.

De acuerdo con el mandatario, en las cifras alcanzadas inciden las propias insuficiencias de la economía nacional debido -entre otras causas- a los problemas acumulados, estructurales y de funcionamiento, pero también al bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por Estados Unidos.

Díaz-Canel subrayó que no se pueden subestimar las afectaciones ocasionadas por esa política unilateral, la cual se ha recrudecido durante la administración de Donald Trump, en particular la persecución financiera. Solo en 2018 el monto de la afectación ascendió a 4 mil 321 millones de dólares, a precios corrientes.

Sobre las proyecciones para 2019, el Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros dijo que se trata de un plan realista y objetivo, en un año de ordenamiento y ajuste, pero sin negar el crecimiento.

Exigió el cobro oportuno de las exportaciones, evitar gastar más de lo que se ingresa e invertir con calidad. “El plan defiende el principio de que el país se enmarque en lo que sea capaz de ingresar y garantiza crecer en inversiones asociadas a los programas fundamentales del país”, así como presenta un mejoramiento en indicadores económicos, la reanimación y desarrollo local, y crea las bases para mayores impactos de la economía en los años futuros.

Llamó a que en los sistemas de trabajo no haya espacio a la burocracia, pues “a veces los plazos para ejecutar proyectos son muy grandes”, en tanto manifestó la necesidad de reforzar y capacitar las estructuras y equipos de gestión económica, aprovechando el talento de expertos, científicos y especialistas, y se valoren sus propuestas.

Díaz-Canel argumentó que el contexto requiere, a su vez, una actitud más intensa, proactiva y concreta en el accionar de los dirigentes, “de manera que trabajamos impulsando y no demorando las decisiones”.

Planteó la necesidad de ser coherente con lo aprobado en la Conceptualización del Modelo Económico Cubano y sistemáticos en la implementación de los lineamientos, sin dogmas y con realismos.

Hay que fortalecer la empresa estatal socialista, pues aunque se han tomado medidas para fortalecer su autonomía, todavía está “amarrada”, lo que frena su desenvolvimiento para que sea el principal eslabón de la economía. Se precisa también encadenarla y conectarla con el sector no estatal y la inversión extranjera, abundó.

Según Díaz-Canel, otras de las urgencias del país es impulsar la inversión extranjera directa, considerada elemento esencial en la estrategia para su desarrollo socioeconómico, así como defender mejor la producción nacional y detener la cadena de impagos.
Con información de ACN