Compañía del avión que se estrelló en Cuba tendrá que pagar multas por cerca de $90,000
LA HABANA, 18 oct. Global Air, la compañía propietaria del viejo avión Boeing 737-200 que se estrelló en La Habana el pasado mes de mayo, tendrá que pagar varias multas que ascienden a 1.7 millones de pesos mexicanos (cerca de $90,000), según publica este miércoles el diario Reforma.
Luis Gerardo Fonseca, titular de la Dirección General de Aeronáutica Civil de México, señaló que se habían detectado “fallas administrativas” en la compañía tras una auditoría realizada después del desastre aéreo en La Habana que causó 112 muertes.
Aunque la compañía fue notificada de estas sanciones hace casi dos semanas, está intentando evitar las multas mediante un juicio de nulidad. El pasado 2 de octubre Global Air entregó un conjunto de documentos para evitar ser sancionada, pero las autoridades mexicanas han dicho que no es suficiente.
Fonseca había dicho anteriormente que Global Air tenía deficiencias en el mantenimiento de los tres aviones que operaba, incluyendo el del accidente, que había sido rentado por la estatal Cubana de Aviación.
Las autoridades mexicanas suspendieron en mayo las operaciones de Global Air. La aerolínea, registrada bajo el nombre de Aerolíneas Damojh, ya había sido suspendida en el 2010 tras un aterrizaje de emergencia, y en el 2013 por la denuncia de uno de sus trabajadores.
Global Air emitió un comunicado a mediados de julio donde culpaba a los pilotos del vuelo con destino a la ciudad de Holguín del accidente. Según la empresa, los aviadores habían despegado con un ángulo de ascenso muy pronunciado.
Ese mismo día el Instituto de la Aeronáutica Civil de Cuba emitió un comunicado desmintiendo las aseveraciones de Global Air y aseguró que el proceso de investigaciones todavía continuaba.
La única sobreviviente del accidente, la cubana Maylén Díaz Almaguer, ha quedado parapléjica y en estos momentos se encuentra en proceso de recuperación. Los familiares de tres víctimas del accidente ya han presentado las primeras demandas en contra de la compañía en una corte en Chicago, sede mundial de Boeing.
Juana Cutiño Alfaro, cuyos dos hijos murieron en el accidente, y Elba Buitrago Cabrera, que perdió un hermano en el siniestro, afirman que Global Air fue negligente en el entrenamiento de sus pilotos, lo que causó la muerte de sus familiares.
(www.elnuevoherald.com)
