Bruno Rodríguez advierte a diplomáticos extranjeros que Cuba no permitirá marcha opositora

Canciller advierte a diplomáticos extranjeros que Cuba no permitirá marcha opositora

LA HABANA, 11.Nov. El ministro de Relaciones Exteriores de Cuba convocó a embajadores y diplomáticos extranjeros en La Habana el miércoles para advertirles que su gobierno no tolerará una marcha de oposición planeada para el lunes que, según las autoridades de la isla, es un complot orquestado por Estados Unidos para derrocar al régimen.

“Cuba jamás permitirá acciones de un gobierno extranjero en nuestro territorio, tratando de desestabilizar el país”, dijo el canciller Bruno Rodríguez. “El gobierno de Cuba junto a nuestro a pueblo… impedirá cualquier ensayo de acciones inconstitucionales dirigidas a un cambio de régimen en Cuba”.

“No lo permitiremos”, enfatizó.

El inusual encuentro con diplomáticos tuvo lugar pocos días antes de la marcha organizada por el grupo cívico Archipiélago para el próximo lunes en toda la isla. La represión del gobierno contra los manifestantes que tomaron las calles en julio provocó una condena generalizada de la comunidad internacional.

Archipiélago, integrado por jóvenes artistas y activistas, dijo que seguirá adelante con sus planes a pesar de las amenazas de la Fiscalía General de Cuba de que los manifestantes serán acusados de varios crímenes.

Pero los miembros del grupo dijeron que harán algunos cambios para tratar de minimizar las interacciones con la policía y los partidarios del gobierno a quienes se les ha dado órdenes de confrontar a los manifestantes.

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Archipiélago dijo que la marcha para abogar por la liberación de los presos políticos es legal bajo la constitución cubana y el grupo solicitó autorización a las autoridades, la que fue denegada.

En las últimas semanas, las autoridades cubanas han desplegado una campaña para intimidar y desacreditar a los organizadores de la marcha, disuadir a los cubanos de unirse a la protesta y presentar la iniciativa como parte de los esfuerzos del gobierno de Estados Unidos para desestabilizar el país.

Además de las amenazas de presentar cargos por desorden público y otros delitos, los agentes de la seguridad del Estado amenazaron a los activistas con presentar otros cargos no relacionados, por ejemplo, por la compraventa de suministros en el mercado informal, lo que está prohibido.

Saily González, una de las líderes de Archipiélago, compartió en las redes sociales que agentes de la policía le dijeron que sería procesada por comprar harina para su café y hostal Amarillo en Santa Clara. Recientemente, ella había cerrado el negocio por temor a represalias contra sus empleados debido a su activismo.

Agentes de la seguridad del Estado también están interrogando a miembros y simpatizantes de Archiélago, advirtiéndoles que no deben salir de sus casas el lunes o serán detenidos.

El 11 de julio, miles de cubanos salieron a las calles de toda la isla. Pero poco después, Rodríguez negó que hubiera ocurrido un levantamiento contra el gobierno. En declaraciones a los diplomáticos extranjeros el miércoles, el canciller dijo que Estados Unidos estaba financiando y organizando la marcha y la oposición interna.

“No hay acciones autóctonas de desestabilización en Cuba, de oposición a nuestro gobierno”, dijo y agregó que el supuesto plan para subvertir el sistema político en Cuba no funcionará.

“La política de Estados Unidos contra Cuba está condenada al fracaso”, dijo.

(www.elnuevoherald.com)